Humorista colombiana: las voces que ríen y denuncian en Colombia

Humorista colombiana, una mujer que usa la comedia como herramienta de crítica social, resistencia y cambio cultural en Colombia. También conocida como comediante colombiana, esta figura no solo hace reír, sino que expone lo que muchos callan: corrupción, desigualdad, machismo y la locura cotidiana de un país en constante transformación. No es solo hacer chistes. Es poner el dedo en la llaga con un micrófono en la mano y una mirada que no se rinde.

Las humoristas colombianas no vienen de los grandes teatros de Bogotá, sino de las plazas de Medellín, los bares de Cali y los festivales de Barranquilla. Ellas son las que, tras un chiste sobre el precio del pan, te dejan pensando en por qué el pan cuesta tanto. Son las que, con un monólogo sobre el acoso callejero, convierten una risa colectiva en un grito silencioso. Su arte no se mide por la cantidad de likes, sino por cuántas mujeres se sienten vistas por primera vez, cuántos hombres se cuestionan sus actitudes, cuántos jóvenes deciden no callar más.

La sátira en Colombia no es un lujo. Es supervivencia. Y las humoristas colombianas la usan con precisión quirúrgica. No necesitan máscaras ni escenarios de lujo. Con una silla, un micrófono y una historia real, desmontan mitos que la política y los medios no logran tocar. Su influencia va más allá del escenario: inspira programas de TV, mueve redes sociales, y en algunos casos, incluso cambia leyes. ¿Te acuerdas del chiste que se volvió trending por denunciar el acoso en el transporte público? Eso no fue casualidad. Fue arte con propósito.

En este espacio encontrarás lo que realmente importa: las historias de quienes se atreven a reír cuando todo parece perder el sentido. No son solo artistas. Son testigos, denunciantes, terapeutas colectivas. Aquí no hay chistes vacíos. Hay voces que rompen silencios, que desafían el poder con un gesto, una pausa, una risa que duele porque es verdad. Si quieres entender qué pasa en Colombia más allá de las noticias de violencia o política, mira lo que hacen estas mujeres con el humor. Porque en su risa, hay más verdad que en muchos discursos.